(Bruselas, 1914 - París,
1984) Escritor argentino. Hijo de padres argentinos, a los cuatro años Julio
Cortázar se desplazó con ellos a Argentina, para radicarse en la provincia
andina de Mendoza.Tras completar sus estudios
primarios, siguió los de magisterio y letras y durante cinco años fue maestro
rural. Pasó más tarde a Buenos Aires, y en 1951 viajó a París con una beca.
Concluida ésta, su trabajo como traductor de la Unesco le permitió afincarse
definitivamente en la capital francesa.
Por entonces Julio Cortázar
ya había publicado en Buenos Aires el poemario Presencia con el
seudónimo de «Julio Denis», el poema dramático Los reyes y la primera de
sus series de relatos breves, Bestiario, en la que se advierte la
profunda influencia de Jorge Luis
Borges.
La literatura de Cortázar
parte del cuestionamiento vital, cercano a los planteamientos existencialistas,
en obras de marcado carácter experimental, que lo convierten en uno de los
mayores innovadores de la lengua y la narrativa en lengua castellana. Como en
Borges, sus relatos ahondan en lo fantástico, aunque sin abandonar por ello el
referente de la realidad cotidiana, por lo que sus obras tienen siempre una
deuda abierta con el surrealismo.
Para Cortázar, la realidad
inmediata significa una vía de acceso a otros registros de lo real, donde la
plenitud de la vida alcanza múltiples formulaciones. De ahí que su narrativa
constituya un permanente cuestionamiento de la razón y de los esquemas
convencionales de pensamiento.
El instinto, el azar, el
goce de los sentidos, el humor y el juego terminan por identificarse con la
escritura, que es a su vez la formulación del existir en el mundo. Las rupturas
de los órdenes cronológico y espacial sacan al lector de su punto de vista
convencional, proponiéndole diferentes posibilidades de participación, de modo
que el acto de la lectura es llamado a completar el universo narrativo.
Tales propuestas alcanzaron
sus más acabadas expresiones en las novelas, especialmente en Rayuela,
considerada una de las obras fundamentales de la literatura de lengua
castellana, y en sus cuentos, entre ellos Casa tomada o Las babas del
diablo, ambos llevados al cine, y El perseguidor, cuyo protagonista
evoca la figura del saxofonista negro Charlie Parker.
Muy pronto, Julio Cortázar
se convirtió en una de las principales figuras del llamado «boom» de la
literatura hispanoamericana, y disfrutó del reconocimiento internacional. A su
sensibilidad artística sumó su preocupación social: se identificó con los
pueblos marginados y estuvo muy cerca de los movimientos de izquierdas.
En este sentido, su viaje a
Cuba en 1962 constituyó una experiencia decisiva en su vida. Merced a su
concienciación social y política, en 1970 se desplazó a Chile para asistir a la
ceremonia de toma de posesión como presidente de Salvador Allende y, más tarde,
a Nicaragua para apoyar al movimiento sandinista. Como personaje público, intervino
con firmeza en la defensa de los derechos humanos, y fue uno de los promotores
y miembros más activos del Tribunal Russell.
Como parte de este
compromiso escribió numerosos artículos y libros, entre ellos Dossier Chile:
el libro negro, sobre los excesos del régimen del general Pinochet, y Nicaragua,
tan violentamente dulce, testimonio de la lucha sandinista contra la
dictadura de Somoza, en el que incluye el cuento Apocalipsis en Solentiname
y el poema Noticias para viajeros. Tres años antes de morir adoptó la
nacionalidad francesa, aunque sin renunciar a la argentina.